La historia de la Commodore C65, la computadora que nunca pudimos tener

10/05/2022 - 10:30:00 por Fabio Baccaglioni - 2844 - 5 - En Informática

Para los nostálgicos hablar de la Commodore C64 es un momento de recuerdo, memoria, alegrías y risas pero cuando se les pregunta del sucesor de la C64 todos piensan en la C128 como continuación directa.

Pero he aquí que hubo otra computadora, una que nunca vio la luz, la que realmente iba a ser la sucesora, la C65.

Un poco de historia

Commodore estaba en aprietos, la C64 había sido su gran caballito de batalla pero los problemas con el management de la empresa, la poca idea que tenían los nuevos directivos sobre el negocio y el crecimiento exponencial de la PC indicaban que algo debía hacerse.

Por un lado Commodore tenía un relativo éxito en las modernas Amiga, pero así como le sucedió a Apple con la Apple II es muy difícil separarse del producto que te dio de comer durante mucho tiempo.

Para 1989 las ventas de Commodore 64 caían abruptamente y así como Apple lanzó la Apple IIGS para tratar de revigorizar el producto se esperaba de Commodore algo similar.

Para 1990 la decisión de crear la C65, la sucesora de la C64, se había tomado y comenzó el proceso de crear la idea, programar el sistema operativo y preparar un lanzamiento... pero al año siguiente, Irwin Gould, el CEO de la firma, canceló el proyecto.

¿Habían logrado algo? Commodore siguió cuesta abajo aun con buenos productos en preparación, pero la falta de una visión general la llevó a la bancarrota en 1994.

La C65 existió

Lo que pocos de mi generación supieron es que efectivamente los empleados de Commodore habían creado la C65. Sólo que faltaba terminarla, pero existía!

Cuando la empresa fue liquidada en 1994 varios de los prototipos se vendieron a coleccionistas, se habían producido un par de miles como mucho ¿Cómo eran?

Por dentro la C65 iba a tener un procesador propio, el CSG 65CE0, creado en 1988 por "Commodore Semiconductor Group", la división de procesadores de la compañía, basado en el clásico MOS 6502 que era el CPU de la C64.

Había sido desarrollado a partir del CMOS WDC 65C02 y estaba fabricado en un proceso CMOS de 2 µm que era un gran paso adelante con respecto al NMOS de 8 µm del viejo 6502.

Era mucho más rápido, en un sólo ciclo hacía cosas que para las que el anterior requería dos, permitía paginación de memoria para alcanzar más de 64Kb extendiendo notablemente las posibilidades del original. La memoria máxima crecía hasta 1Mb.

El clock era de 3.54MHz contra 1Mhz del 6502 y ese 25% extra de velocidad al reducir la necesidad de ciclos le daba casi 5 veces más potencia. Sin dudas una gran mejora.

El nuevo chip gráfico era el VIC-III que permitía una paleta de 4096 colores utilizando 256 a la vez solamente (para la época era fabuloso, pocos podían pagar un VGA), con modos de color de 320×200×256, 640×200×16, 640×400×16, 1280×200×4, y alta resolución de  1280×400×4, para una computadora hogareña de 1990 era bastante bueno.

Adicionalmente soportaba todos los modos del  VIC-II y ofrecía tanto 40 como 80 columnas de caracteres por 25 filas, también habilitaba algo que en las Amiga era muy común, la sincronización con una fuente externa (genlock) muy usada en la Amiga 500.

El sonido pasaba a ser estéreo con dos chips CSG 8580R5, la C64 tenía un sólo SID, y éste permitía control independiente de los canales.

El equipo base iba a salir al mercado con 128KB de RAM con la posibilidad de expansión (era caro en esa época) con un puerto similar al de la Amiga 500 para aprovechar el mercado existente.

La ROM era de 128Kb y ésta incluía el Commodore BASIC 10.0 que le sacaba diez años de mejoras al BASIC 2.0 de la C64.

Al igual que muchas de su época la disketera ya era interna, una de 3½"  y el teclado contaba con 77 teclas y algo ya más usual en esos años que eran las flechas en la misma ubicación que se usan hoy en día.

Algo interesante es que esta C65 ya tenía un sistema operativo que podía controlar completamente la disketera (la C64 tenía hasta un 6502 con su propio sistema dentro de la disketera!). Los diskettes almacenaban 880Kb y era posible conectar una C1581 (los discos eran compatibles entre éstas), o las más viejas 1541 y 1571.

Y todo esto... fue abandonado

¿Qué sucedió con las sobrantes?

Como se imaginarán la C65 es un objeto de colección super exclusivo, tener una te asegura poseer un poco de la historia más exclusiva, es como tener una Apple I, uno sabe que son pocos los que comparten semejante privilegio.

Esto provoca que el precio de reventa y/o subasta crezca año tras año porque no sólo son atesoradas: son muy deseadas.

En 2009 un equipo funcionando alcanzó los €6060 en EBay, en 2011 uno vendió una máquina incompleta por USD 20.100!! 

En 2013 otra subasta en Ebay alcanzó los €17827. en 2015 otra cerró en €20050, otra en 2016 los €15605.

Una C65 con la expansión de RAM prototipo se vendió a €81450 en 2017, una rareza dentro de la rareza y la última, vendida hace poco en Abril de 2022 funcionando y todo, se vendió a €47105.

Hoy la C65 vive en el proyecto MEGA65 que produce un modelo similar basado en un FPGA que emula los chips utilizados en los modelos de base.  Existe un emulador, XEMU, para tratar de usar el sistema de la C65, es decir, aun siendo una rareza hay toda una comundiad detrás con la idea de revivir, en lo posible, la mejor computadora que jamás fue.

Update 27/11/2023: 8 Bit Guy hizo review de una funcionando